CUANDO SE TROCÓ LA RUTA.
Fragmento del mapa: Carta de la Provincia de Quito y de sus adyacentes / obra póstuma de Don Pedro Maldonado.
Ya está establecida plenamente en el siglo XVIII la ruta de Orellana por el Coca-Napo como pueden apreciar en el mapa de Don Pedro Vicente Maldonado
¿Quedando alterada la ruta de Pizarro y Orellana desde 1639, se sostiene esa maquinación hasta el día de hoy, pero ustedes se preguntarán que importancia tiene, cuando y por donde se encontró al Amazonas?, y yo me pregunto y le pregunto a:
Colombia:
¿Qué tenemos, aparte de perder la localización de nuestro Imperio, las importantísimas tribus, Omaguas, Parianas y demás que lo conformaron?.
Yo le digo: Esta temprana distorsión de la ruta que siguió la primera búsqueda de El Dorado, que se hizo desde la tierra y por informes de los Incas, ayudó a esconder su grandeza.
Legitimó hace más de 300 años a Ecuador para que hoy tenga: Provincia, ciudad, calles y turismo con esa ruta y nombre de Orellana, pero no tiene las tribus y bajo tierra sus ofrendas, que son posibles si se buscan en los lugares adecuados.
Pero no estamos solos en esta pérdida:
El Perú: A lo largo de su frontera pierde a: El primer pueblo al que llega Orellana, Yrrimorray, Aparía y parte de Machiparo.
Brasil: A Machiparo, Omaga, Oniguayal, Ica, Omaguas..
No entran en estas cuentas: los trece señores que llegaron al primer pueblo antes de Yrrimorray y los veintiséis que llegaron a Aparía, recomiendo a ustedes ver de esta Web el Menú: La cultura más importante de América.
Ecuador:
No tiene Nada, aparte de las yucas que tenía el San Miguel y, por lo tanto, evidencia de recientes viviendas, el resto de frontera con el Putumayo y Colombia eran los 400 kilómetros deshabitados que motivaron la partida de Orellana.
Gilda Mora.
El caballito de batalla que
Trastornó la ruta fue la guerra sobre la primacía del descubrimiento del Amazonas que sostuvieron las comunidades religiosas asentadas en Quito primaron sobre el objetivo de obstruir las reclamaciones de Portugal sobre el mismo río.
Muy poco tengo que agregar a lo que ustedes van a leer pues es largo y no viene al caso exponer sobre los distintos motivos políticos que se sucedieron en esos primeros tiempos y separación de gobernaciones, Lima, Popayán, Quito y Nuevo Reino, Brasil, pero terminan las disputas en que se estableciera entre otras cosas como principio del descubrimiento de Orellana a los ríos Coca y Napo, así que veamos su comienzo.
LA PELEA.
Fray José de Maldonado, Orden de Frailes Menores, Comisario General de las Indias
...El Gran Río de las Amazonas, por otro nombre Río del Marañón, si bien borrados éstos y otros nombres antiguos y gentiles el año de nuestra redención de mil y seiscientos y treinta y siete por el gobernador Jácome Raymundo de Noroña, y nombrado Río de San Francisco de Quito por haberle descubierto y navegado, en estos tiempos, religiosos de su sagrada y seráfica religión como a quien leyere este breve escrito constará. Este río, pues, es el mayor que los tiempos han descubierto, y las noticias alcanzado en el dilatado espacio del orbe; grande por su famosa posición, y mayor por su dilatado curso, pues corriendo por muchas leguas diversas provincias, recoge y bebe en sí las aguas de muchos y caudalosos ríos y arroyos;....
..Y para que se vea más clara la verdad de lo que he dicho y falta por decir acerca de que nuestros frailes fueron los que descubrieron y han hecho fácil la navegación de todo este río en estos tiempos, y que a ellos se les debe la gloria, pues sólo ellos pasaron los trabajos, diré lo que hizo el gobernador Jácome Raymundo de Noroña, y fue: que así en los papeles auténticos que despachó a estos reinos de España, como en los que envió a la Real Audiencia de Quito, a que me remito, nunca llamó a este río: el Río Marañón o el Río de las Amazonas, sino el Gran Río de San Francisco de Quito, pareciéndole justo, y puesto en razón, que, pues los hijos del seráfico Francisco lo habían descubierto para perpetua memoria, sería bien darle el nombre del Padre y así ordenó que en todas aquellas provincias se llamase como se llama hoy y se debe llamar ajustadamente: El Río de San Francisco de Quito...
Las pretensiones de los Franciscos parten de sus primeras misiones por el río Putumayo, ruta y conocimiento de la misma que solo podía haber dejado la expedición de Orellana, se extienden por la región de los Sucumbíos y se produce por parte de algunos de los misioneros embarcados en Aguarico afluente del Napo su llegada a las fortalezas portuguesas del Para y se desprende la expedición de Pedro de Texeira en 1638, este sube a Quito por Napo lo que confiere a Portugal derechos de descubrimiento que mal defiende Quito, lo que prueban los límites y territorio de Portugal antes y después de esta expedición, los Franciscanos no pudieron sostener su idea de Putumayo-Amazonas después de la mencionada navegación de Texeira. Veamos:
De la misma obra: Historiadores y cronistas de las misiones, sigue Fray José de Maldonado: Relación del descubrimiento del Río Amazonas, (El link a esta obra lo encuentran en Bibliografía Digital )
....fray Francisco Anguita, fray Juan de Casarrubias, sacerdotes; fray Domingo Brieva, fray Pedro de Moya y fray Pedro Pecador, legos, hijos todos del santo convento de San Pablo de Quito en los reinos del Perú, para que abrazados en el amor divino aspirasen a la conversión de las muchas almas infieles y bárbaras, que habitaban en las dilatadas orillas, islas y Tierra Firme del Gran Río de las Amazonas, de que en aquella ciudad y Provincia de Quito y otras partes del Perú, había grandes y frecuentes noticias. Y con el celo santo que los estimulaba pidieron licencia para tan santa y piadosa jornada al Ministro Provincial de aquella santa provincia, hasta dar cuenta y comunicar este caso con el Presidente de la Real Audiencia, el señor Antonio de Morga y demás oidores de la ciudad de Quito, los cuales abrazando todos de conformidad esta santa determinación, mostraron tanto afecto y gusto que luego despacharon sus provisiones y cédulas reales, mandando a los gobernadores, corregidores y tenientes de la gobernación de Popayán, que todos favoreciesen, amparasen y acudiesen con lo necesario a los cinco religiosos.
(Primera salida por el Putumayo) .....El año, pues, de nuestra salud de mil seiscientos y treinta y dos, por los fines de agosto salieron los cinco religiosos de su convento, llevando la bendición de su Prelado y los ojos y lágrimas de sus compañeros, y nombrándoles por su Comisario al P. fray Francisco Anguita. Con feliz viaje llegaron a la ciudad de San Antonio de Pasto en la gobernación de Popayán, y después de apercibirse de lo necesario para tan incierto y dilatado viaje, solos y sin compañía alguna de soldados o religiosos de otra religión se pusieron en camino para la ciudad de écija de los Sucumbíos que está a treinta leguas de mal camino de la ciudad de Pasto. Llegados a la sobredicha ciudad de écija fueron bien recibidos de todos sus moradores principalmente de Alonso Hurtado, Teniente de Gobernador, el cual, en virtud de las Cédulas Reales que llevaban, les dio canoas y por lengua un indio llamado Pata. Y embarcados en el puerto que llaman La Quebrada del Pueblo, a dos días de navegación, desembocaron en el Gran Río Putumayo, con que ya nuestros religiosos tomaron posesión y se vieron en las deseadas aguas del nombrado Río de las Amazonas, por el cual navegaron once días y al cabo de doscientas leguas llegaron a la provincia de los Seños, indios de guerra, y desembarcando en el pueblo más principal que está algo la tierra adentro,...
(Segunda salida por el Putumayo).......Y embarcados en el Río de San Miguel, que es uno de los que entran en el de las Amazonas, al cabo de ocho días de navegación llegaron a la Provincia de los Becavas,
(Tercera salida por el Napo).....salieron de la ciudad de Quito cinco religiosos que fueron el P. fray Juan Calderón, el P. fray Laureano de la Cruz, fray Domingo Brieva, fray Pedro de la Cruz y fray Francisco de Piña, los cuales llegaron a San Pedro de los Cofanes, donde estaba el sobredicho Capitán, y allí embarcados en Aguarico, a diez días de navegación, salieron al Río de las Amazonas...
Los misioneros de la Compañía tienen al mismo tiempo las misiones del Marañón y Pastaza muy al sur de Napo, Misiones ubicadas siguiendo la ruta de Ursúa, se adentran por los ríos hasta llegar al Napo, siguiendo por Napo y por la ruta descubierta por Texeira y redescubierta por ellos llegan a Quito, por lo que también pretenden su descubrimiento.
Empiezan a llamar al Napo Río de Orellana agregado este nombre al de Marañón y Amazonas que llamaban los Franciscos y establecen esta ruta como obligatoria y principal hacia el oriente de Quito. En la biblioteca Cervantes pueden encontrar: Historia de la Compañía de Jesús en la antigua provincia de Quito 1570-1774. (el link se encuentra en Bibliografía Digital en el listado de menús)
Apéndice F
Disposiciones varias de los Superiores de la Compañía sobre las misiones del Marañón
16.- Por haberse experimentado ser grandes los costos y riesgos que hay para ir de Quito a los Maynas por el camino de Loja y de Jaén por ser tan dilatados, se ordena que en adelante ninguno vaya ni venga por dicho camino, sino por Archidona o Napo.
22.- Desde Baeza a Archidona van en hombros de indios que se les han de enviar desde Archidona, con indios que lleven las cargas, y el padre que estuviere en Archidona por cura, pagará por cuenta de la Misión o reducción adonde fuere, lo que se gastare con dichos indios en géneros como se acostumbra de los que hay en dicha tierra o de los que llevan de acá, según la costumbre que allá corre.....
LA RESPUESTA DE LA COMPAÑIA A LAS PRETENCIONES FRANCISCANAS
De la obra: Historiadores y cronistas de las misiones Estudio y selecciones de Julio Tobar Donoso
..............Con la Relación que sigue contesta el Provincial de los Jesuitas de Quito, P. Rodrigo Barnuevo, a otra Del descubrimiento del río de las Amazonas, por otro nombre Marañón, hecho por la religión de Nuestro Padre San Francisco por medio de los religiosos de la provincia de San Francisco de Quito. Para informe de la Católica Majestad del Rey Nuestro Señor y su Real Consejo de las Indias, que ordenó e hizo imprimir en Madrid el P. Fr. José Maldonado, natural de Quito, Comisario general por la Orden franciscana de todas las Indias..... la presente Relación y la fecha en 31 de mayo de 1645.....
.......en los brazos de la Compañía de Jesús y en los de sus religiosos, soldados espirituales de esta gran milicia, el primer descubrimiento del gran río de las Amazonas o Marañón, por otro nombre, cuyas aguas y riberas, habiendo servido de Jordán bien glorioso a los primeros bautismos de gentiles de los muchos que alimenta en sus orillas su copioso gentilismo, ahora en estos tiempos, resucitando su descubrimiento más crecido y adulto, quieren que se confirme, y que dejando todos los nombres modernos y antiguos, se llame San Francisco de Quito, por haberle navegado religiosos del serafín Francisco, siendo así que por esta razón primero se había de llamar San Ignacio del Quito, pues soldados suyos y religiosos de la Compañía de Jesús, fueron los primeros que pisaron sus márgenes y administraron a los gentiles, que habitan sus riberas, el sagrado bautismo. Pero como el humilde San Ignacio tiene por blasón dar a Dios la gloria de todo, y por eso quita el nombre de su Compañía y se lo da a Jesús, imitadores de tal Capitán sus soldados, de tal padre sus hijos, aunque fueron los primeros descubridores de este gran río y de las numerosas provincias de su gentilismo, ni le quitan sus nombres, ni le dan el suyo, por no apropiarse esas glorias, deseosos de que se las llevase Dios todos; porque se vea cómo quitaran propias glorias a los otros quien sabe menospreciar aun la suya propia que por derecho le toca.
COMO TERMINAN LAS CONTROVERSIAS.
En la anterior imagen está muy claro el celo del Padre Acuña que pertenecía a la Compañía, conoce las pretensiones de Texeira y los mojones que fue dejando sobre el Amazonas pues lo acompaña en su viaje de regreso al Brasil, intuye una complicación más peligrosa con Portugal que la lucha de comunidades y no se equivoca, empieza a llamar a este río de Orellana y lo hace nacer a las faldas de Quito, es de notar su intención cuando dice y pueden ver en el original de su obra: .."Pero de hoy en adelante, no lo permitirá la ciudad de San Francisco de Quito"..
Padre Pablo Maroni año 1737.
....Entre todos el de más nombre es el tan celebrado río Marañón o Amazonas, el cual, después de haber caminado cerca de mil ochocientas leguas desde su nacimiento en gran parte paralelo con la línea equinoccial, entra por fin en el Océano del Norte por varias horas, ensanchándose, según opinión la más común, por más de ochenta leguas, y conservando la dulzura de sus aguas por más de treinta después de entrado en la mar.
Dudaron muchos historiadores antiguos, y aun lo dudan al presente algunos modernos, cuál sea el origen principal de un río portentoso, que no tiene probablemente igual en todo el Orbe.
Unos quisieron apropiar esta gloria al río Napo, de cuyo origen se dirá en su lugar, casi sin más fundamento que haber servido de puerta a su primer descubridor Francisco de Orellana y acercarse sus cabeceras a la provincia de Quito, de quien toma a veces también el nombre, llamándose Río de Quito .
Otros con alguna más razón dijeron lo mismo del Río de la Coca, a cuyas orillas fabricó su bergantín dicho Orellana, pues éste excede en el caudal de las aguas al de Napo, a quien recibe como se dirá en adelante, como de costado. Desde las juntas de los dos las relaciones antiguas dan a entrambos el nombre de Orellana, Marañón y Amazonas.
Denlos en hora buena el nombre que quisieren, pero no por esto hemos de afirmar ser este el río principal a quien buscan como madre todos los demás, pues quien cotejare atentamente lo ancho que tiene el Napo o el Coca, que es de cerca de 300 brazas, con el que tiene el río que llamamos vulgarmente Marañón, hallará que éste le excede cuando menos en un tercio, y por consiguiente a éste se le debe la gloria de ser el río principal a quien tributan todos los demás. Añádase a esto, que según me ha enseñado repetidas veces la experiencia, el río Napo, después de algunas jornadas de subida, le estrecha lo bastante, y lo que es aún más digno de reparo, las embarcaciones topan a menudo en arenales que embarazan el paso y obligan los remeros a andar en busca de la madre del río, señal evidente de su poca profundidad, lo cual no sucede con el Marañón, el cual conserva constantemente casi la misma anchura y profundidad hasta S. Francisco de Borja y estrechura.
El nombre que hoy le dan comúnmente no sólo los misioneros de la Compañía, sino también todos los que habitan las provincias cercanas del Perú, no es otro que el de Marañón, nombre que le dio su primer descubridor, el capitán Marañón, quien registró su boca algunos años antes de la conquista del Perú; o como se refiere en una relación antigua del hermano Pedro Limón de nuestra Compañía, de que se dirá en otra parte, habiendo penetrado con algunos indios desde el Brasil hasta el Cuzco, fue bajando por el río Ucayali hasta este río, y siguiendo su rumbo, llegó a la mar y por la costa volvió otra vez al Brasil.
Los geógrafos así antiguos como modernos le llaman Orellana y más comúnmente Río de las Amazonas, con qué fundamento, lo examinaremos después. Otras veces le dan el nombre de Gran Pará, que en la lengua general del Brasil suena lo mismo que Río, o como dice el P. Vieira, Mar Grande. Los portugueses que hoy habitan sus riberas, a más de Amazonas, y le llaman Río Blanco, a distinción del Negro, que es el más caudaloso de los que con él se juntan a la banda del Norte, ya Solimones, ya Cambebas, según las provincias que baña.
Lo que me parece excusado el advertir es que de ningún modo se le pueden apropiar los nombres de Orinoco y Plata, por ser estos ríos en todo distintos, con quienes es muy probable que no tiene la menor comunicación, en particular con el Orinoco mediante el río Caquetá o Mocoa, como sospecharon muchos geógrafos y se dirá en su lugar.
Como empieza la versión de la navegación, por el actual río Coca.
El padre Cristóbal de Acuña, acompaña a Texeira en su viaje de regreso a Pará por el río Amazonas en el año de 1638. Lo descrito por el padre Acuña en su informe sobre esta expedición, era lo conocido hasta ese momento sobre el Napo y sus afluentes, los Franciscanos habían llegado seis años antes a la región de la Amazonía entrando por el río Putumayo y el Aguarico, se puede decir que el viaje de Texeira es el que abre las puertas a ella.
Los siguientes apartes del informe del padre Acuña nos dejan presentes las vías de acceso al amazonas y la descripción de los ríos que ya navegaban para llegar él los Franciscanos.
Acuña es el creador oficial de la versión de Coca-Napo-Amazonas, su versión de la construcción del barco en la boca Coca-Napo no tuvieron como sustentarla los posteriores historiadores y sin embargo aferrados a la idea, decidieron la fabricación del dichoso barco en algún lugar sobre el Coca, un imposible en ese entonces (y en este), debido a la condición del río Coca que él mismo describe.
El camino de Napo a Quito de ese entonces era por Archidona como el mismo padre afirma en su relación de la subida de la armada Portuguesa a Quito. Para el regreso de Texeira a Brasil, se delega en Acuña hermano se sangre y representantante del entonces gobernador de Quito, la responsabilidad de tomar las distancias, relación de ríos y poblados que existen en el Amazonas con destino a la corona española, puede y decide adjudicar la navegación de Orellana al Coca-Napo aún a sabiendas de que no se podía acomodar a la ruta que deja escrita el Padre Carvajal que acompaña a Orellana en el descubrimiento del río un siglo antes, pero prima al momento de presentar el informe final de la expedición, la conveniencia de la ciudad de Quito y la de su Orden.
El porqué de esa pretensión que desgraciadamente si plantó y aún la sostienen todas las academias, se explica en el artículo del Menú Varios: Ruta de Cristóbal de Acuña seguida con tecnología satélite
La relación de las entradas al río Amazonas y topografía de los afluentes que nos deja su manuscrito, necesariamente contradice la interpretación que hace a la ruta de Orellana, estas contradicciones las pueden cotejar con la ruta y descripción de tribus y distancias del Padre Carvajal que van a ver en el artículo siguiente.
En este y otros manuscritos antiguos la lectura se hace un poco pesada pues muchas de las letras que parecen f son s.
Y así se ha quedado la navegación por el Napo a pesar de las cartas topográficas del siglo XVII, que afirman la navegación de Orellana por el río Putumayo.
En el menú la cartografía y el Dorado pueden constatar en todos los mapas presentados esta grave alteración de la historia que si bien se dio en siglos pasados no es pertinente que en este se sostenga.
Lo recorrido por Orellana desde el lugar de la canela por el Putumayo, es la tercera parte del total navegado hasta la llegada al mar.
El padre Cristóbal de Acuña recorre el Amazonas en 1638.