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EL HOMBRE DORADO.

serranía Omegua
serranía Omegua

El Hombre Dorado.

"Sus casas, apartadas unas de otras, puestas en oteros y cerros".

Es la constante de todas las crónicas para describir el hábitat de las tribus deformadoras de cráneo y caníbales de toda América.

Para llegar al lugar de la imagen el terreno es llano y anegadizo; La tierra se va haciendo más árida, a medida que se notan más terrazas de habitación hasta conformar la serranía desértica, "las ampollas" cada vez son más hermosas, más pulidas, más terrazas, la tierra es estéril desértica mala, no puede alimentar plagas ni propagar malezas.

Este es el lugar de "las tierras ampolladas" donde Pedro de Silva vio las huertas, esas huertas casi se pueden ver en los caños que hay entre ampolla y ampolla en gran cantidad, las huertas descritas por los cronistas son claramente ornamentales.

Sobre este tema nos ilustra francisco López de Gómara cuando trata de los Jardines de Moctezuma en México.

Gómara. pagina 11 ..con muy buenos jardines solamente de hierbas medicinales y olorosas flores, de rosas, de árboles de olor, que son infinitos. Era para alabar al Creador tanta diversidad, tanta frescura y olores. El artificio y delicadeza con que están hechos mil personajes de hojas y flores. No consentía Moctezuma que en estos vergeles hubiese hortalizas ni frutas, diciendo que no era propio de reyes tener granjerías ni provechos en sus lugares de deleites; que las huertas eran para esclavos o mercaderes, aunque con esto tenia huertos con frutales, pero lejos, y donde pocas veces iba...

A este lugar que hoy casi es inútil por lo remoto, estéril y quebrado, le tributaban y rindieron vasallaje en los tiempos precolombinos varias naciones.

La serranía albergó la capital de esa gran nación, su topografía es perfecta de acorde al principal requisito que buscaron estos pueblos del Imperio en toda América y aún desconocemos el porqué de su dependencia por los lugares elevados, donde no los había, les construían montículos de diversos tamaños, Ver el artículo, El Imperio, del Menú: El Dorado

Dijo Basilio Vicente de Oviedo (1699 - 1774).

Basilio Vicente de Oviedo ( 1699 - 1774).
Basilio Vicente de Oviedo ( 1699 - 1774).

Hoy queremos desconocer la muy importante referencia de este sacerdote boyacense, esta descripción es absolutamente veraz, pero tardía, estos "belicosos" se habían dispersado y retirado a lo profundo de la selva un siglo atrás.

A la referencia del Moxa dorado se debe agregar que los Moxas que sacrificaban los Chibchas los adquirían en estos los llamados llanos del Ariary, y esta fue la localización del Hombre Dorado que siguieron todas las expediciones posteriores a Sebastián de Belalcázar que fue el que le dio el nombre. Y es diferente al Dorado de Guatavita que implanta Fray Pedro Simón y todas las academias adoptan para avalar el pretendido Imperio Chibcha de la Sabana de Bogotá…

¿La riqueza de oro?, se comprueba en el siglo XX: "Llegó a haber 15 o 20 mil personas buscando oro. Era fácil; uno arrancaba un árbol y debajo estaban las pepas." (Ver adelante Taraira)

De los tres enormes asentamientos culturales que hemos visto en este Menú, la cabeza inicial de este gran Imperio fue el Dorado del Meta. Su emplazamiento, hasta finales del siglo XVI, era esta serranía.

Llego a esa conclusión:

1- Por la calidad de la localización, fácil acceso a Norte, Sur, Oriente y Occidente.
2- Por la culturización extraordinaria de las lomas, que son la prueba real y material de la continuidad y extensión del cacicazgo
3- Por la cercanía al dominio de las minas de esmeralda.
4- Fue del que más se habló y tanto se buscó, como está expuesto en el Menú correspondiente.
Documento del siglo XVI que aclara la búsqueda y señala el lugar del dorado que dejo escrito Gonzalo Jiménez de Quesada

Tratando del río Orinoco dice:

FR. Alonso de Zamora en su Historia de la Provincia de San Antonino, página 9:

. Es numerosa la multitud de Naciones, que sustenta en sus orillas tan fértiles, que en ellas se halla la nuez moscada. Sus tierras tienen ricos minerales, de que es dueño la poderosa Nación de los Omaguas; calidísimos sus temperamentos, sus bosques madrigueras de bravísimos tigres…

En los artículos anteriores hemos visto que en el Meta se asiló a los incas, este asilo se da en 1530 y años subsiguientes, pero se desencadenan las expediciones y llegan las misiones.

¿Migran los Omeguas acompañados por esos Incas hacia el interior del Vaupés y Coqueta, según se desprende de los escritos posteriores?

¿O se consumen en el tiempo, por el aislamiento, y enfermedades, viruelas, tifo, sarampión, peste negra y otras, en las serranías del Meta?

Cosa no probable, pues, aparece Paititi, lo más seguro es que buscaran el amparo muy efectivo de la profundidad de las selvas y sus familias Agua.

Es lo que la arqueología tiene que contestar y he dicho a mi gobierno: "es posible que la única huella de su existencia consista en los cimientos de las viviendas. Entonces el legado será el suelo que protegió esta mágica cultura"

Antes del siglo XVIII, se dijo de su cacique:

Gonzalo Fernández de Oviedo.

Tercera parte de la general y natural historia de las Indias islas y Tierra Firme del mar Océano. Libro XLIX Capítulo II

… Preguntando yo por qué causa llaman aquel príncipe el cacique o rey Dorado, dicen los españoles, que en Quito han estado en aquí a Santo Domingo han venido (e al presente hay en esta ciudad más de diez ellos), que la que esto se ha entendido de los indios es que aquel gran señor o príncipe continuamente anda cubierto de oro molido en tal menudo como sal molida; porque le parece a él que traer otro cualquier atavío es menos hermoso, en que ponerse piezas o armas de oro labradas de martillo o estampadas o por otra manera, es grosería en cosa común, en que otros señores en príncipes ricos las traen, cuando quieren; pero que w con oro es cosa peregrina, inusitada e nueva e más costosa, pues que lo que se pone un día por la mañana se lo quita e lava en la noche y se echa o pierde por tierra; y esto hace todos los días del mundo empolvarse es hábito que andando, como anda de tal forma vestido o cubierto, no le da estorbo ni empacho ni se cubre ni ofende la linda proporción de su persona e disposición natural, de que mucho se precia, sin poner encima otro vestido ni ropa alguna.

Yo querría más la escobilla de la cámara, este príncipe, que no la de las fundiciones grandes que de oro ha habido en el Perú o que puede haber en ninguna parte del mundo. Así que, este cacique o rey dicen los indios que riquísimo y gran señor, y con cierta goma o licor que huele muy bien se unta cada mañana, y sobre aquella unción asienta y se pega el oro molido o tan menudo como conviene para lo que dicho, y queda toda su persona cubierta de oro desde la planta, del pie hasta la cabeza, e tan resplandeciente como suele quedar una pieza de oro labrada de mano de un gran artífice.

Y creo yo que sí ese cacique aquello usa, que debe tener muy ricas minas de semejante calidad de oro, porque yo he visto harto en la Tierra Firme, que los españoles llamamos volador, y tan menudo que con facilidad se podría hacer lo que es dicho. Así que, Reverendísimo Señor, este rey dorado es el que aquellos andan buscando" Hasta aquí Oviedo...

¿Tierras riquísimas?, se queda corto Oviedo, eso lo vamos a ver con Taraira y lo que aún no se ha encontrado en estas enormes selvas.

La existencia de un soberano precolombino que precisara estar untado, o mejor dicho vestido y que se pintara con polvo de oro no es descabellada dado que todas las tribus desnudas de las tierras cálidas en especial las del Orinoco cubrían sus cuerpos con distintas resinas y colores como aclara ampliamente el misionero Gumilla, capítulo Vll página 89:

... ¿Pero qué doctor habrá hoy, que componga, y hermane, no la inocencia, que no la tienen, sino la disolución, y la brutalidad de aquellos gentiles, con la ignorancia, que realmente tienen de que están desnudos? porque muchos misioneros antes de estar prácticos en el ministerio, han llevado, y repartido algún lienzo, especialmente a las mujeres, para alguna decencia; pero en vano, porque lo arrojan al río, o lo esconden por no taparse; y reconvenidas para que se cubran, responden Duraba ojaduca: no nos tapamos, porque nos da vergüenza...

... Todas las naciones de aquellos países, a excepción de muy pocas, se untan desde la coronilla de la cabeza, hasta los pies, con aceite y achiote; y las madres a tiempo de untarse a sí mismas, untan a todos los chicos, hasta los que tienen en sus pechos, a lo menos dos veces al día, por la mañana, y al anochecer...

… Y los días clásicos para ellos, va sobre la untura mucha variedad de dibujos de varios colores... sea el que fuere, chico, o grande, sale con suma repugnancia de su casa si no está untado de pies a cabeza; y esto, aun después de domesticados...

...de modo que reconoce el padre, que faltan de aquellas filas en que los forma el fiscal, cuatro o seis muchachos, va luego el fiscal a buscarlos, y vuelve sin ellos diciendo: padre no pueden venir, porque están desnudos ¿Cómo es eso, replica el padre, todos estos no están desnudos también? Sí, padre, responde: pero están untados…

Paititi ubicación
Paititi ubicación
El Sabio Humboldt.

Con esta imagen delimito a ustedes estos dos lugares, uno ya estaba señalado como prueba la siguiente carta del siglo XIX basada en las apreciaciones e investigaciones del Sabio Humboldt, que grabó J. C. Walter en Londres, en el año 1842,

El concepto de este gran sabio y su teoría nunca se tuvo en cuenta y la comprueba tristemente un accidente como el de Taraira y no una exploración dirigida.

…"Un nudo de bajas montañas, aquí de acuerdo con Humboldt, llamado Tunuhy (hoy Tunahy) se supone abunda en riquezas minerales. ¿El Dorado?". Este está en la llamada Nueva Granada, centrado sobre los 71º"……

Es la presentación que hace de este mapa el Atlas Histórico Geográfico, Archivo General de la Nación, (de Colombia), y jamás fue tenido en cuenta por los profesionales encargados de estudiar estas materias.

Paititi
Paititi

las imágenes satélite nos muestran como se acercan los ríos de la selva por medio de sus distintos afluentes que hacen posible recorrerla de Sur a Norte y de Oriente a Occidente, navegando.

Afluentes de Amazonas son los ríos Putumayo y Caquetá que ha recibido al Apaporis y el río Negro que ha recibido al Vaupés.

El Río Negro conecta con el Orinoco por medio del brazo Casiquiare

Afluentes del Orinoco son el río Meta y el Guaviare que ha recibido al río Inírida

En la serranía de Chiribiquete por la parte norte pasan los ríos Vaupés y Apaporis, hay entre el Vaupés y el Apaporis en ese sector un acercamiento de menos de 20 kilómetros de distancia, por la parte sur de Chiribiquete pasa el río Caquetá.

Entre el alto Vaupés que es el río Itilia y el río Guaviare hay un acercamiento de menos de 30 kilómetros de distancia entre ellos.

El río Meta y el Guaviare prácticamente se unen por medio del río Aríari.

Entre el río Guainía que es el nacimiento del río Negro y el Inírida hay menos 30 kilómetros.

Los ríos Guaviare y Caquetá se unen prácticamente a la altura sur de la serranía de la Macarena por medio del río Caguán que desemboca en Caquetá y este con el Putumayo se acercan a menos de 5 kilómetros uno del otro.

Es de notar en las imágenes satélite infinidad de ríos menores y múltiples caños que vuelven estas distancias a casi 0, motivo por el cual decían los misioneros se podía navegar en canoa entre los ríos, desde el Cuzco y desde el Paraguay a la pata de la sabana de Bogotá, sin desembarcar.

ríos selva
ríos selva
TARAIRA DEL SIGLO XX

Agosto 8 de 2003 ELTIEMPO.COM-ESPECIAL FRONTERAS

.... La primera vez que Alfonso Castañeda llegó a Cerro Rojo, en 1985, había caminado 29 días por la selva desde Mitú. Iba tras la pista de un indígena que llegaba a veces a Mitú con oro. La gente lo seguía, para averiguar de dónde lo traía, pero él se perdía en la selva.

Hasta que se supo que venía del río Taraira. "No había mapas, y uno llegaba a ojo, y todavía había caníbales en el río Pirá", cuenta.

Cuando se descubrió el punto preciso, en Cerro Rojo, a seis horas a pie del río, en la serranía de Taraira, vino una avalancha."Llegó a haber 15 o 20 mil personas buscando oro.
Era fácil; uno arrancaba un árbol y debajo estaban las pepas." Todo se pagaba en oro.

Una botella de trago, en los tiempos en que la guerrilla lo tenía prohibido, llegó a valer 12 gramos de oro.....

Artículo de la rds. de Colombia ..... La minería de oro de Taraira
arrancó con el boom que se originó al descubrirse oro libre grueso visible sobre las Serranías de Machado y Garimpo y dentro de los Caños que se desprenden de ellas. Su extracción era sencilla no requería de ninguna tecnología.

Se volcó la gente sobre el área y se habla de 8.000 personas que alcanzaron a llegar. Algunos sitios de explotación en orden de aparición fueron: Peladero- Cerro Rojo- La Sabana- Cerro Bombo- Cerro Piedra.

Se habla de un señor Fortuna Brasileño que andaba con mapa y brújula en mano, quien indicó varios de los sitios que trabajaron.

El trabajo se concentró sobre el afloramiento de las Venillas en las partes altas de la serranía y sobre los caños que se desprendían de estos sitios.

La gente que participó de este boom llegó con su hamaca, la que fijaban entre dos árboles y un plástico encima, el cambuche tradicional de la selva, no conocían de selva y la mayoría tampoco de minería. Cada uno refiere su propia historia, su propia aventura de entrada y de las necesidades que tuvieron que atravesar...

El desdén que en los últimos siglos se ha mantenido con la cultura de la selva, se tiene que reconsiderar, que doloroso es ver acabado un lugar que está desde hace tiempo señalado y además bien conocida la región por la arqueología, pues el célebre sitio de la Pedrera siempre nos enseñó de la grandeza del sector.

Los ríos de la selva de Colombia

Sobre estos ríos hay muchísimas cosas sin mirar, he hecho un link de una expedición programada a estas remotas selvas del Vaupés y Caquetá en cráneos pequeños sobre la:

EXPEDICIÓN ESPELEOLÓGICA "AMAZONIA 2000 - CAQUETA.

Informa entre otras cosas de los pequeños seres que viven (y vivían) en las cavernas de un cerro, en el siguiente Link pueden ver como se enlazan estos artículos.

SOBRE LOS CRÁNEOS PEQUEÑOS

Estos pequeños s
eres parece que aun existen en las selvas del Vaupés, son una inquietud adicional que me acompaña hace muchos años y convivían con las familias del Imperio, Chamanes del Amazonas y los buscadores de metales en el 2006 hablan de ellos, pero son considerados grandes mitómanos y no hay quien revise estas historias.

Taraira es conocida por su calidad aurífera recién en los años 90. Ahora tenemos en la red distintos artículos que nos hablan de esta región que fue desde tiempos del padre Acuña denunciada como de inmensa riqueza en oro.

 tepuyes de Mavecure del río Inirida
 tepuyes de Mavecure del río Inirida

Fotografía de los tepuyes de Mavecure del río Inírida tomada por Carlos Torres.

MANOA

La Condamine, Manoa, Taraira.

Es clara la ubicación que podemos sacar, en esta relación de La Condamine, que une las crónicas de los padres Fritz y Acuña, quienes fueron el primero conversor de los Omaguas del Amazonas por largos años y el segundo fue el encargado de llevar el informe a la corona española de lo encontrado en la expedición de Texeira por el río y su encuentro con Aguas, Yurimaguas y Omaguas.

La Condamine año 1944...... Iquiari, río de Oro..... El P. Acuña asegura que por diferentes caminos, que él indica, se llega desde el Yupura (Río Caquetá EN COLOMBIA) al Iquiari, al que llama río de Oro. Añade que los habitantes en las cercanías del Iquiari comerciaban en este metal con los manaos, sus vecinos, y éstos con los indios de las riberas del Amazonas, a los cuales compró un par de pendientes de oro.

El P. Fritz cuenta en su diario que en 1687, esto es, cincuenta años después que el P. Acuña, había visto llegar ocho o diez canoas de manaos, que llegaron, aprovechando la inundación, desde sus campamentos de las riberas del Yurubech hasta la orilla septentrional del Amazonas, para comerciar con los yurimaguas, sus catecúmenos. Dice además que tenían costumbre de llevar, entre otras cosas, laminitas de oro batido, que los manaos reciben a su vez en los cambios que hacen con los indios del Iquiari. Todos estos lugares y ríos están señalados en el mapa de este padre...

El Yupura (Caquetá), cuya desembocadura principal está enfrente de Paraguari, sería, por consiguiente, el Río de Oro, cuyas bocas, mencionadas en dicha acta, estaban enfrente de la villa. Falta saber lo concerniente al Yurubech y al Iquiari, al cual el P. Acuña llama río de Oro y del que dice que se llega a él por el Yupura: esto es lo que me costó más trabajo descubrir; sin embargo, creo haber esclarecido este punto y quizá encontrado el fundamento de la fábula del lago Parima y del Dorado. Pero el orden y la claridad exigen que esta discusión se remita al artículo relativo al río Negro....

...El lago de Oro de Parima, ciudad de Manoa del Dorado... En esta isla, la mayor que se conoce en el mundo, o, mejor dicho, en esta nueva Mesopotamia, formada por el Amazonas y el Orinoco, unidos entre sí por el río Negro,..

Vázquez y cronistas anteriores la figuraron entre Orinoco, Amazonas, Putumayo y Negro, ya en 1600 y después de Berrío se creó Parima del Dorado en la Guayana venezolana.

Sigue La Condamine.......se ha buscado durante mucho tiempo el imaginario lago dorado de Parima y la no menos imaginaria ciudad de Manoa del Dorado, búsqueda que ha costado la vida a tantos hombres, entre ellos a Walter Raleigh, famoso navegante, uno de los cerebros más notables de Inglaterra, cuya trágica historia es bastante conocida.

Es fácil reconocer por las frases del P. Acuña que ya en su tiempo se habían desengañado de esta bella quimera. Os pido perdón para intercalar un pormenor geográfico que no puedo omitir porque se relaciona demasiado con el objeto de mi disertación, y que tal vez sirva para desembrollar el origen de una novela en la que la sed de oro sea quizá lo único que puede darle apariencia de verosimilitud. Una ciudad cuyos techos y paredes estaban recubiertos con láminas de oro, un lago cuyas arenas eran del mismo metal.

Es necesario recordar aquí lo dicho anteriormente acerca del río de Oro y los hechos citados, sacados de las relaciones de los PP. Acuña y Fritz.

El pueblo de los Manaos.

Los Manaos, según este último autor, eran una tribu belicosa, temida de todos sus vecinos. Durante largo tiempo resistió a las armas de los portugueses, pero actualmente se hallan con ellos en amistosas relaciones; en los poblados y en las misiones de las orillas del río Negro hay muchos Manaos establecidos. Todavía algunos hacen incursiones en los territorios de las tribus salvajes, y los portugueses los utilizan para su comercio de esclavos. Dos de estos indios Manaos, que llegaron hasta el Orinoco, fueron quienes raptaron y vendieron a los portugueses el indio cristiano de que antes hablé.

.....El P. Fritz dice expresamente en su diario que los manaos que él vió que venían a traficar con los indios de las riberas del Amazonas, y que extraían el oro del Iquiari, tenían sus moradas a orillas del río llamado Yurubech. A fuerza de pesquisas he sabido que remontando el Yupura (RIO CAQUETA EN COLOMBIA) durante cinco jornadas se encuentran a mano derecha un lago, que se atraviesa en un día, al que llaman Mara-hí o Para-hi que en lengua del Brasil quiere decir agua de río, y que más allá, arrastrando la canoa cuando falta profundidad, en los sitios que se inundan en la época de los desbordamientos, se entra en un río llamado Yurubech, por el cual se llega en cinco días, descendiendo, al río Negro

finalmente, que éste, algunas jornadas más arriba, recibía otro llamado Quiquiari, el cual tenía muchos saltos, y que venía desde un país montañoso y con minas.

El Vaupés es el río que llega al Negro y en las casas piedra veremos parte del misterio que aún guarda y su importancia.

En el siguiente mapa vemos a los manaos localizados sobre el Yurubeche actual Vaupes.

mapa actual
mapa actual

En este mapa reciente podemos ver los lagos y unión del Vaupés, con el Negro que señala La Condamine, Taraira está en la frontera de Colombia con Brasil sobre el Caquetá y el río Taraira es parte de dicha Frontera.

No está muy perdido la Condamine, pues son relativamente cerca estos dos lugares uno del otro y la altura igual, lo que le faltó indagar fue por las serranías existentes la selva adentro: - "...el Iquiari que es el Río del Oro, Donde de al pie de una sierra que allí esta..." - es lo que dice el padre Acuña.

Sigue La Condamine:

...En el mapa del P. Fritz puede verse un extenso poblado de Manaos en el mismo acotamiento, al que denomina Yenefiti. No he podido adquirir noticias positivas, lo cual no tiene nada de extraordinario teniendo en cuenta que la tribu de los Manaos ha sido llevada a otros lugares y dispersada; pero parece muy verosímil que de la capital de los Manaos se inventó la ciudad de Manoa.

Conjeturas sobre las fábulas de Manoa y del lago dorado.-No me atrevo a buscar la etimología de Parima en Mara-hí o Para-hi pues me atengo siempre a las pruebas evidentes. Los Manaos tuvieron en esta demarcación un poblado considerable;
los Manaos vivían en las cercanías de un gran lago, y aun de muchos grandes lagos, pues son muy frecuentes en un país bajo y expuesto a inundaciones; los Manaos extraían oro del Iquiari y labraban con él laminitas. He aquí algunos hechos ciertos que han podido, con ayuda de la exageración, dar lugar a la fábula de la ciudad de Manoa y del lago dorado. Tal vez se hallará que la verdad está muy lejos de las laminitas de oro de los Manaos, de los techos de oro de la ciudad de Manoa, y no menos lejos de las pepitas del precioso metal arrastradas desde las minas por las aguas del Iquiari hasta las arenas auríferas del Parima; mas no puede negarse que, de una parte la codicia y la preocupación de los europeos, que a todo trance querían encontrar lo que buscaban, y de la otra el temperamento embustero y propenso a la exageración de los indios, interesados en alejar de sí a huéspedes incómodos, hayan podido fácilmente relacionar cosas tan dispares en apariencia, alterándolas y desfigurándolas hasta el punto de dejarlas desconocidas. En la historia de los descubrimientos del Nuevo Mundo hay más de un ejemplo de metamorfosis semejantes.

Se ha perdido el recuerdo de estos lugares.- Tantos testimonios acordes, respetables todos y cada uno de ellos, no permiten dudar de su veracidad; sin embargo, el río, el lago, lamina de oro, el mojón y la Villa del Oro, atestiguada por la declaración de tantos testigos, todo ha desaparecido como un palacio encantado, y de estos lugares se ha perdido hasta el recuerdo....

Pero aquí está, y es muy clara la localización, en este siglo.

La siguiente imagen es el escrito en original del Padre Acuña en lo tocante al río del Oro. El río Taraira.

texto Acuna
texto Acuna

MÁS DE ESA REGIÓN DE COLOMBIA, SIN EXPLORAR.

LAS CASAS DE PIEDRA:

De esta región y de hace 100 años nos queda esta maravillosa relación y he tomado de ella lo esencial para que se pueda seguir la ruta que los exploradores hicieron. Es fácil ubicar el río Cuduiary en estos momentos debido a que aún conserva su nombre, al mapa que presenta el autor, los accidentes que denuncia sobre el Vaupés y las imágenes de satélite que confirman la topografía descrita.

"Las casas de piedra" deben ser estudiadas hasta el cansancio y sobre todo no deben olvidar los futuros investigadores que era subterráneo el habitad de los pequeños seres descritos más adelante, en Taraira del siglo XX.

El link al escrito completo y mapas de esta expedición que presenta la Biblioteca Luis ángel Arango de Colombia lo encuentran en el Menú Bibliografía, Bibliografía Digital sección Antropología con este título: Informe sobre mis viajes al alto río Negro y al Caquetá en los años 1903-1905 POR EL DR. THEODOR KOCH-GRÜNBERG EN BERLíN

Apartes del Informe:

......4 de agosto en un bote más grande, que había obtenido en el Tique, partimos rumbo al Uaupés con un equipaje calculado para medio año. Este poderoso río se desliza tranquilamente en su curso inferior donde tiene la anchura aproximada del Rin en Colonia. Sólo a los ocho días de viaje río arriba, en el poblado indígena de Ipanoré hasta donde lograron llegar en su tiempo Coudreau y Richard Payer, empiezan las verdaderas dificultades con una cadena continua de cataratas y saltos de agua….

..;El constante cargar y descargar, el arrastre sobre las afiladas piedras -tuvimos que cruzar solamente en el Uaupés más de cuarenta peligrosas cataratas y rápidos- .... El 21 de Septiembre, después de muchos esfuerzos y peligros, llegamos finalmente a aguas tranquilas y entramos al Cuduiary, un afluente del Uaupés por la margen izquierda, estrecho pero densamente poblado. Encontramos allí la más cordial acogida por parte de los Kobéua...

. THEODOR KOCH-GRÜNBERG EN BERLíN
. THEODOR KOCH-GRÜNBERG EN BERLíN

Sigue:

...Pero retornemos al Cuduiary. Los Kobéua que allí habitan, me habían hablado mucho de grandes sabanas con grandes casas de piedra localizadas en el nacimiento de este río. Intuí de inmediato la existencia en estos parajes de maravillosas formaciones naturales. Resolví indagar al respecto y el 25 de noviembre partí con varios indígenas en una canoa ligera, dejando a Schmidt al cuidado del equipaje. Durante cinco fatigosos días seguimos el curso del río y encontramos una serie de rápidos, difíciles de atravesar por el bajo nivel de las aguas. Fuimos muy bien recibidos por los numerosos habitantes, muchos de los cuales no habían visto nunca un blanco, y llegamos finalmente al nacimiento del Cuduiary que fluye como un pequeño arroyo de pocos metros por entre un denso túnel de follaje. El 29 de noviembre alcanzamos finalmente las sabanas que se extienden a la orilla derecha sobre una meseta. Curiosa escena, inusual para alguien que sólo ha visto la densa selva por largos meses. El área en su totalidad está cubierta con placas de piedra. Una vegetación escasa, que yo nunca había visto antes, lleva una existencia miserable en las grietas de las rocas, expuesta a los rayos del sol: árboles bajos y raquíticos, arbustos atrofiados con troncos puntiagudos en los extremos como un cigarro y gruesos hacia la mitad con un manojo de hojas duras en la corona; aquí y allá una solitaria florecita de color. La mirada vaga sin obstáculos hasta las sierras del alto Vaupés, entre las que sobresale, envuelta en leyendas, Takú, la vivienda de los demonios, con sus escarpadas pendientes rocosas. No es una auténtica sabana sino más bien una estepa rala con matorrales, comparable al Cerradao, el "campo cerrado" de la altiplanicie de Matto Grosso con su vegetación achaparrada que conocí en el año de 1899, aunque en mi humilde opinión de lego el tipo de vegetación de aquí es muy distinto al de allá.

Continuamos avanzando por la altiplanicie candente por el sol, sobre la cual tiembla el aire a causa del intenso calor. Las fuerzas de la naturaleza han excavado sobre las placas rocosas innumerables hoyos y hoyitos con bordes salientes, como si hubieran sido producidos por el caer constante de una gota de agua, de manera que la marcha sobre estas púas ardientes no constituye precisamente uno de los placeres de la existencia. Llevamos ya media hora de camino cuando mi guía Kobéua dice al fin: "!Allí hay una gran casa de piedra!". Al principio no veo nada, el suelo es plano como en cualquier parte, cubierto con numerosas lajas unas encima de otras. Nos arrastramos por una maleza espesa hasta una hendidura baja que aparece en la negra oscuridad, cerca al suelo, entre algunas placas rocosas. Inmediatamente detrás de la estrecha entrada se abre un inmenso laberinto de altas salas y corredores rectos y anchos, de los cuales se desprenden regularmente cámaras a ambos lados. El alto techo, que la escasa luz de nuestras linternas no alcanza a iluminar, está sostenido por fuertes postes que se estrechan hacia la mitad. El suelo plano, como apisonado, cubierto con una fina arena blanca la piedra, una arenisca amarillenta, recubierta de manera similar a las estalactitas con una capa blanca y amarilla, en parte lisa como un espejo y en parte con innumerables hoyos y hoyitos. Visitamos distintos corredores y salones, pero con nuestra escasa luz no llegamos ni cerca del final. Por doquier se oye en la oscuridad un zumbido inquietante: son miles de grandes murciélagos que parecen ser los únicos habitantes de estos palacios.

!De hecho los indígenas tienen razón! Son "casas de piedra" pero no construidas por las débiles manos humanas. !La poderosa naturaleza ha sido el maestro de obras! Cuántos siglos habrán transcurrido para que las inundaciones excavaran estas cavidades en la piedra arenisca y crearan este inmenso laberinto que parece ser se extiende con varias entradas debajo de toda la altiplanicie, y cuántos siglos se deben haber necesitado para culminar esta gigantesca obra.!....

Es lo que hay que confirmar y estamos demorados en hacerlo, muchos lugares que se creyeron construidos por la madre naturaleza hoy en día se prueba que fueron hechos por la mano del hombre.

Esta vista describe muy bien el terreno de las casas de piedra. Según el programa Google Earth, la elevación oscila entre los 300 y 450 metros, el nivel de la selva en el sector es de 200 Metros promedio.

casas de piedra
casas de piedra